La salud oral debe considerarse como parte indisociable de la salud general.

A nivel sistémico, la presencia de gran cantidad de bacterias en la boca hace que estas puedan pasar a la sangre y afectara otras partes del organismo, pudiendo aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Por otro lado, algunos estudios sugieren que determinadas formas crónicas de enfermedades periodontales pueden tener relación con la obstrucción arterial, la angina de pecho, los partos prematuros o el bajo peso de los bebes al nacer; mientras que la perdida dentaria antes de los 35 años de edad podría ser un factor de riesgo de Alzheimer.

En cuanto a los pacientes con glucemia no controlada presentan un mayor riesgo de padecer enfermedad periodontal y sufrir perdida de dientes.

Por su parte, el HIV o SIDA, podría propiciar mas infecciones en la mucosa oral que las habituales en una persona sana. Asimismo, además de la importancia de la salud oral para la general, esta contribuye a mejorar la calidad de vida, las relaciones laborales y sociales, y disminuye los cuadros de dolor y molestias de la población. Sin embargo, a nivel mundial, el 90% de la población esta sometida al riesgo de algún tipo de enfermedad bucodental.

 

Gaceta Dental. Año XXIV –Nº 246 -6.